De las cuatro ermitas que posee Olocau del Rey, la ermita de San Marcos es la más grande de ellas. Fue construida a finales del siglo XVI y, según la tradición, San Marcos se le apareció a un habitante de Olocau del Rey, pidiéndole que se edificara una ermita. Tras su construcción, y debido al aumento devocional al santo y al auge de una feria anual que se realizaba en su honor, se decidió ampliar la ermita, en 1769.
Está formada por un conjunto de edificios: la ermita, la vivienda del ermitaño, la hospedería y los cobertizos. Todos ellos configuran un espacio cerrado triangular, formando una plaza empedrada y atravesada por el antiguo camino que unía Teruel con Morella.
La ermita destaca por su gran majestuosidad, resaltando la fachada principal, de fábrica elegante y amplia, y rematada con una espadaña. La planta del tempo es de cruz griega. El tambor se alza sobre pechinas y alcanza los 27 metros de altura.
Esta ermita acoge dos romerías anuales, el 25 de abril (San Marcos) y el 24 de junio, pero la fiesta grande en honor al patrono, se celebra cada cuatro años, el 24 de noviembre.
Aquesta ermita acull dos romeries anuals, el 25 d’abril (San Marcos) i el 24 de juny, però la festa gran en honor al patró se celebra cada quatre anys, el 24 de novembre.